Fluruguay

Domesticada en China como cultivo de consumo directo por los humanos hace mas de 5000 años, la soja sigue un camino de transformación tecnológica muy veloz en el siglo XX. Es en EE.UU. donde se convierte en un cultivo de muy alto rendimiento y amplia distribución geográfica destinado a sostener la producción animal.

SOJA #1

Como todos los porotos (y las plantas leguminosas en general), la soja obtiene de la atmósfera el nitrógeno que otros cultivos sólo consiguen de la reserva del suelo o del fertilizante. Esto la vuelve muy eficiente produciendo proteína, material que constituye más de un tercio del peso del grano.

SOJA #2

Las variedades transgénicas de soja resistentes al glifosato han facilitado la expansión del cultivo favoreciendo un uso muy intenso de este herbicida, disparando también la aparición de malezas capaces de resistirlo.

SOJA #3

La soja representa la fuente de proteína más barata del planeta, que es usada fundamentalmente para alimentar los animales que críamos y consumimos (principalmente pollos y cerdos). Globalmente, el 87% de la soja se procesa para separar la harina proteica (4/5 del grano, destinado totalmente a los animales) del aceite (1/5 de grano, destinado a consumo humano y en parte a la producción de biodiesel).

SOJA #4

Las ventajas tecnológicas y comerciales que ofrece la soja han llevado a que se cultive en forma continua durante años, favoreciendo procesos de degradación de suelos asociados a su pobre cobertura de los lotes una vez cosechada y a su alto consumo de fósforo. La rotación con otros cultivos, incluidos aquellos que complementan su ciclo durante los meses de invierno, permite mitigar parcialmente estos problemas.

SOJA #5